miércoles, 12 de noviembre de 2008

Doping en el atletismo. Tercera y última parte.

El atletismo junto con el ciclismo tal vez sean los deportes más azotados por escándalos en el mundo del doping. Ya hablé en una anterior entrada de diversas atletas alemanas que habían sufrido cambio de sexo. Este es otro caso:
Balian Buschbaum sigue siendo una celebridad en Ulm, la ciudad alemana donde nació, pero sus tiempos de gloria deportiva y de escándalo mundial cuando anunció que dejaba el deporte para cambiar de sexo (dejaba de ser Yvonne, medalla de bronce en el Europeo de 2002 en salto con pértiga, y pasaba a ser Balian) pasaron. Ahora es un hombre anónimo que dejó su puesto en el Ejército y empieza a ganarse la vida como entrenador.
Además hay miles de casos y sanciones en el mundo del atletismo por doping. Visitad esta página: http://atletismoweb.com/positivos.htm
Y nada que decir sobre los velocistas. A mí particularmente el caso que más me impactó cuando era pequeño fue el de Ben Johnson. En el Campeonato del mundo de 1987 celebrado en Roma, Johnson se hizo famoso al derrotar a Lewis batiendo además el récord del mundo con un registro estratosférico, 9,83 segundos. Un año más tarde, Johnson y Lewis volverían a enfrentarse en una gran final, los Juegos de 1988. De nuevo, Johnson ganó a Lewis, y lo hizo rebajando aún más el récord mundial dejándolo en 9,79 segundos. El mundo quedó maravillado, una hazaña de la grandeza de Bob Beamon, una plusmarca que perduraría, un atleta que sería recordado, Johnson era un héroe. Pero pocos días después, un análisis de orina demostró que Johnson había consumido esteroides lo que le valió la descalificación por dopaje. El escándalo fue tan grande o más de lo que había sido su victoria. La prueba reina de la velocidad quedó en entredicho y muchos atletas quedaron ensombrecidos por la caída de Johnson.
Más tarde reconocería haber consumido esteroides cuando consiguió el Record del Mundo de 1987 lo que provocó que el registro quedara también anulado. Su descalificación otorgó la medalla de oro a Carl Lewis, la plata a Linford Christie y el bronce a Calvin Smith. Aunque Johnson fue el único atleta que dio positivo en el examen, no es el único que ha consumido determinadas sustancias prohibidas por la federación de atletismo. Años más tarde, se descubrió que Christie también consumía esteroides.
En 1991 Johnson intentó regresar a las pistas sin demasiado éxito, haciendo una mejor marca de 10,31. En 1993 Johnson parecía acercarse a su mejor forma, pero un nuevo control de dopaje con resultado positivo, truncó definitivamente su carrera al ser suspendido de por vida.
Y escándalos más recientes y penosos como el de Marion Jones. Velocista Norteamericana, que consiguió grandes éxitos tales como 5 medallas en los Juegos de Sidney. Más adelante, y tras sucesivos escándalos con su ex-marido y también velocista Tim Montgomery, le han llevado a la aténtica ruina. El COI le anuló todos sus triunfos. Tuvo que devolver todas las medallas ganadas, y encima en enero del 2008, el juez de la Corte de Distrito de Estados Unidos (White Plains), la condenó a 6 meses de prisión. Actualmente tiene serios problemas económicos.
Parte de información extrida del siguiente enlace: Podéis ver su biografía aquí.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Yo también disfruté muchísimo viendo a Marion Jones. La verdad es que era rapidísima. Luego cuando empezó con escándalos con su marido perdió todo su carisma.
La verdad es que me llevé una gran decepción cuando la condenaron a prisión. Saludos. Me gusta tu blog. Me parece interesante.